Historias mundialistas: Defendiendo colores ajenos

Historias mundialistas: Defendiendo colores ajenos:

Cada cuatro años el mundo celebra el futbol con una gran fiesta, 32 equipos se reúnen para defender a su país, a su gente, a sus colores y su camiseta; Hoy día debido a la mercadotecnia es normal ver que las segundas indumentarias de las Selecciones Nacionales sean de colores que nada tienen que ver con el país, pero el escudo siempre queda intacto.

Entre las curiosidades que aparecen en la historia de los mundiales hay una que resalta debido a que algunos equipos han tenido que jugar defendiendo otra camiseta, una que en nada representa a su nación y todo por debido a que antes el balompié no estaba envuelto en tantas normas como en la actualidad. Estos son los dos casos más sonados de Selecciones que jugaron un partido oficial de Copa del Mundo con uniformes prestados.

Brasil 1950:

México vs Suiza:

El 2 de julio de 1950 México y Suiza debían enfrentarse dentro de la Copa del Mundo de Brasil 1950. El mismo día del encuentro ambas selecciones se dieron cuenta que su uniforme era rojo, situación que haría imposible disputar el encuentro, para ser justos se tiró una moneada al aire para decidir quién cambiaría su camiseta y el ganador fue México. Sin embargo el equipo americano cedió a los Suizos el derecho a jugar con su indumentaria original.

El problema era que el combinado mexicano no contaba con otra camiseta, por fortuna esta escuadra se hospedaba en las instalaciones de Porto Alegre por lo que pidieron prestados los uniformes al equipo Gremio.

México perdió el encuentro por marcador de 2-1 y se despidió de la cuarta Copa del Mundo defendiendo una camiseta a rayas blancas y azules.

Argentina 1978

Francia vs Hungría

Para 1978 el futbol ya estaba más reglamentado pero un error de la FIFA creó un caos en el partido del la última jornada del grupo uno entre Francia y Hungría. La máxima autoridad del balompié comunicó a los dos equipos que tenían que llegar al Estadio José María Minella con su segundo uniforme, cuál fue la sorpresa cuando galos y húngaros se presentaron con indumentaria blanca. La discusión comenzó hasta que el equipo francés propuso portar playeras prestadas y así sucedió. El equipo consiguió el jersey del Atlético Kimberly, un pequeño equipo que viste a rayas verdes y blancas.

Debido al problema el encuentro comenzó 45 minutos tarde, los franceses vestidos de manera ajena a sus colores derrotaron 3-1 a Hungría pero ambos equipos quedaron eliminados ya que quienes accedieron a la siguiente ronda fueron Argentina e Italia.

Escrito por @Claudiovu