El Benfica contra su propia historia

El Benfica contra su propia historia:

A tan solo una semana de que se dispute la final de la UEFA Europa League entre el SL Benfica y el Sevilla FC, ya se habla de estadísticas, resultados históricos entre ambos, en que momento físico y anímico llegan ambos equipos y muchos datos más. Pero otro tema  sobre esta final y que ocupa páginas de periódicos, ya que llama la atención de muchos curiosos del futbol, es la ya famosa y conocida maldición del ultimo entrenador que levanto un título europeo con la camiseta del Benfica, el húngaro Béla Guttmann.

"El Benfica en los próximos 100 años no volverá a ser campeón europeo sin mí" Eso dijo el ex entrenador del Benfica Béla Guttmann hace 52 años después de hacerle campeón de Europa. Pues lo que parecía solamente una fea despedida, ha acabado convirtiéndose en un quebradero de cabeza para los lisboetas.

El húngaro pensaba que la tercera temporada era la más difícil para un entrenador, así que pidió un aumento de sueldo. Las negociaciones entre técnico y directiva no llegaron a buen puerto, hubo mucha tensión y el club decidió destituir a Bela Guttmann. Tras su marcha, el húngaro dijo la ya histórica y lapidaria frase.

Desde que ganara esa final en 1962 derrotando al Real Madrid C.F y consiguiendo su segunda copa continental, el conjunto portugués ha disputado 8 finales más,  perdiendo las siguientes cinco finales de la máxima competición continental (1963, 65, 68, 88 y 90), una de la UEFA en 1983 y la última de Europa League ante el conjunto ingles del Chelsea el año pasado.

De Guttmann se dice que fue quien llevó a Brasil el 4-2-4, disposición en el campo con la cual la selección brasileña ganó el Mundial del 58. Ese año, precisamente, llegó a Portugal, donde se consagró como entrenador. Llegó al Oporto e hizo a Os Dragoes campeones de Liga. Y el Benfica se lo llevó la temporada siguiente. Y con él la gloria. Parte de ese éxito radicó también en la presencia en el equipo lisboeta de Eusebio.

El próximo 14 de Mayo en Turín, en el estadio de la Juventus, el Benfica jugara su final europea número once, la novena tras Béla Guttmann. No solo jugara contra el Sevilla FC, sino que tendrá que hacerlo contra la historia, una losa que lleva encima suya 52 años, y que por caprichos del destino o por esa “maldicion” le ha privado de ser uno de los más grandes del continente