Dos penaltis, una expulsión y un príncipe en el Emirates:
El Bayern de Munich volvió a ganar al Arsenal en el Emirates Stadium como ya hicieron la pasada campaña. El partido no defraudó, Ozil y Álaba fallaron desde los once metros, Szczesny fue expulsado y Tony Kross se coronó en Londres con un auténtico golazo.
Sin duda era una de las eliminatorias mas esperadas por los aficionados al fútbol y desde luego que no defraudó. Arsene Wenger nos sorprendía a todos a una hora de comenzar el encuentro cuando decidió poner a Yaya Sanogo en el puesto del francés Giroud, por su parte Pep volvió a confiar en la pareja española Thiago - Javi Martínez en la medular y decidió jugar con Mario Mandzukic arriba.
El conjunto "gunner" comenzó el encuentro con mucha fuerza y gozando de la posesión del balón aunque la primera gran ocasión fue de Tony Kross que obligo a Szczesny a realizar una buena intervención a los 4 minutos de juego. En uno de los ataques de los ingleses Jerome Boateng derribó a Mesut Ozil y el árbitro pitó penalti. El propio mediapunta alemán fue el encargado de lanzar la pena máxima, pero su compatriota Manuel Neuer despejó el mal tiro del 10 del Arsenal. Tras este penalti fallado, el Bayern dio un cambio radical al partido y se adueñó del balón.
Pasada la media hora de juego sería Szczesny el que derribaría a Robben en el otro área, el árbitro lo vio claro y pitó penalti y expulsión para el portero polaco. Wenger decidió quitar a Cazorla para poder dar entrada Fabianski, algo que no gustó a la parroquia del Arsenal. David Alaba fue el encargado de realizar la pena máxima, pero su tiro se estrelló en el poste.
El partido se fue con cero a cero al descanso. A la vuelta de los 45 minutos, Pep decidió sentar a Boateng y poner en su lugar a Rafinha, recolocando a Javi Martínez en el centro de la defensa y Lahm en el medio centro, algo que le salió extraordinariamente bien.
El conjunto bávaro dominó el balón perfectamente desde ese momento y en el minuto 54 se adelantó en el marcador gracias a un disparo precioso de Tony Kross a la escuadra, el nuevo príncipe del Emirates, que volvió a abrir la lata por segundo año consecutivo al Bayern en Londres.
El Bayern aplastó al Arsenal en juego en la segunda parte, rozando el 75% de posesión en muchos tramos de partido, con nueve jugadores en campo del Arsenal, que trataba de achicar balones como fuera, y con unos geniales Lahm y Kross.
El colofón llegaría en el minuto 88, cuando un buen centro de Lahm fue aprovechado por Muller para marcar el 0 a 2 definitivo. El vigente campeón deja muy encarrilada la eliminatoria ante un Arsenal que tendrá que buscar la machada en el Allianz Arena ganando de tres goles.
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